⭐⭐⭐

Son dos ensayos sobre la locura y la ciencia: el primero, más extenso, arriesga una genealogía de los límites al optimismo científico en las correspondencias entre la física, el terror o la ciencia ficción. El segundo es el retrato casi anecdótico de una mujer paranoica que le sirve a Labatut de excusa para cuestionar nuestra obsesión con "curar" la locura. No sé si yo esperaba demasiado por los excesivos elogios que conocí, pero me decepcionó un poco encontrarme con estos ensayos más bien convencionales, un poco cruzados por el desamparo apocalíptico que hace unas décadas dominaba Baudrillard (a veces con más gracia y originalidad) o hace más de un siglo anunciaba Nietzsche en su fiera oposición entre ciencia y mito (El origen de la tragedia).